Las palomitas de maíz o popcorn pueden ser un snack saludable, si las preparas sin aceite o con una cantidad mínima y tampoco te excedes con la sal. Si piensas que así no saben ricas, quédate para leer los trucos: crujientes o espumosas, especiadas si lo deseas y con unas 30 kcal por taza, nada más.
¿Por qué explotan las palomitas de maíz?
Antes de ir al turrón, en este caso a las deliciosas palomitas y sus múltiples posibilidades, tomemos un chupito de Física. No sé si de niño tú también te preguntabas por qué unos granos de maíz dan palomitas y otros no. Sabía que dependía del tipo de maíz, pero el pop que transforma el grano duro en algo mucho más grande y suave era algo que me traía un poco de cabeza.
Para que un grano de maíz pueda transformarse en una palomita, debe ser de ciertas especies cuya cubierta externa (pericarpio) es impermeable. Después, dentro de las especies llamadas de maíz para palomitas o maíz palomero, habrá granos que no exploten jamás porque presentan daños en el pericarpio o no poseen la suficiente humedad en su interior. Y otros que solo necesitan más azzzuuuuuuúcarrrrrrr… digo, calor.
El interior de un grano de maíz palomero contiene, sobre todo, almidón y humedad, agua. Cerca de un 10% de su contenido es agua, aunque no se aprecie al molerlo para hacer harina.
Al tener un pericarpio impermeable y muy duro, no elástico, si calentamos el interior del grano por encima de los 100 ºC, esa humedad pasa a estado gaseoso. A mayor temperatura, más va a intentar expandirse el agua gaseosa, de manera que ejerce mayor presión desde dentro hacia afuera. Cuando logramos que esta presión sea de 9 a 11 veces la presión atmosférica, el pericarpio no soporta más y se rompe.
Entonces se forma la palomita de maíz en menos de un segundo. El ruido pop es la señal. La rotuta del pericarpio puede ser mayor o menor, pero sí lo suficientemente grande como para permitir al almidón y al agua gaseosa escapar a toda velocidad.
¿Por qué se transforman al instante en una esponja blanca y aromática, una vez se han abierto?
Al salir, tiene una consistencia de gel, pero inmediatamente se enfría, al contacto con el aire y también porque el vapor de agua logra escabullirse en forma de pequeñas burbujas. Donde estaba vapor de agua pasa a haber aire, de modo que la masa blanca continúa siendo como unas esponja que puedes morder sin poner en riesgo una muela.
Mientras esto sucede, por efecto de la elevada temperatura dentro del grano de maíz, el almidón se ha transformado. Primero ha absorbido moléculas de agua para lograr una consistencia de gel (a partir de unos 60 ºC) y después se reordena en sus cadenas de amilosa (muchas glucosas unidas de madera línea con un enlace químico muy concreto). Tenemos almidón cocinado.
Si hemos sometido al grano de maíz a una combinación de temperatura y tiempos propicia, lograremos tener lo que se conoce como almidón resistente, una vez el alimento se enfría.
Luego te cuento por qué nos interesa llegar a conseguir mucho almidón resistente para hablar de palomitas de maíz healthy.
Reaprovechar los granos que no han explotado
Existen dos hipótesis para explicar por qué algunos granos de maíz palomero no explotan al cocinarlos:
- Presentan daños en el pericarpio, de modo que no es impermeable.
- No tienen mucha humedad interna. Estos últimos pueden llegar a explotar si los calentamos un poco más, para que alcancen la presión necesaria para romper el pericarpio sin dañar.
Por tanto, si te han quedado muchos granos sin explotar cuando preparas palomitas, puedes apartarlos y darles una segunda oportunidad. Algunos se despertarán.
Algunos vendedores señalan la tasa de apertura de los granos al ser cocinados en condiciones habituales.
Cuidados para que exploten casi todos los granos de maíz
Para obtener la mayor tasa de apertura que permita el tipo de maíz palomero que tienes entre manos, lo primero es intentar que los granos no reciba impactos fuertes. Después, puedes hacerlos en dos tandas o bien manejar cantidades moderadas, para asegurar que les aportas una elevada temperatura sin que el almidón ya cocinado comience a quemarse.
El aceite y la mantequilla que se suele añadir a las palomitas tiene la función de facilitar la transmisión de calor, desde fuera hacia dentro y desde dentro hacia fuera, pero puedes hacer palomitas riquísimas sin una gota de aceite, en un microondas o en un horno.
La receta más sencilla y más sana para disfrutar de un bol de palomitas saludables
Yo preparo palomitas de maíz en microondas, en un recipiente de silicona de uso alimentario apto para horno. Resiste más de 200 °C sin comprometer la calidad de su contenido, y en un microondas los granos de maíz pueden alcanzar los 170-180 °C, por lo que no hay riesgo.
Como es lógico, necesito tapas de un material similar, y evito que salten por efecto empuje de las palomitas atándolas al recipiente con un cordel de cocina tipo bramante. Hago una lazada y reutilizo el mismo cordel.
Me imagino que se puedan preparar palomitas de maíz hechas al aire con los electrodomésticos adecuados, aunque quedarán mejor con un poco de aceite. El microondas eleva la temperatura de las moléculas de agua nada más, lo que en este caso equivale a calentar desde dentro, y por eso explotan bien sin la ayuda del aceite o la mantequilla.
¿Por qué digo que mis palomitas de maíz son saludables? Porque no empleo aceite o, como mucho, 1 cucharada para unos 25 gramos de granos crudos, y porque apenas les añado sal. En su lugar, uso curry y quedan mucho más sabrosas. Además, ¿te imaginas el olor del maíz recién tostado con las especias? Para mí, esta receta le da mil vueltas a las tradicionales.
¿Cómo hacer palomitas más crujientes?
El almidón de las palomitas se vuelve crujiente al enfriarse con rapidez, de modo que, en principio, las palomitas sin aceite pueden ser menos crujientes. Pero, si las sacas de inmediato del recipiente y retiras la tapa para que entren en contacto con la temperatura ambiente, apenas hay diferencias.
¿Puedo recuperar el crujido de las palomitas sobrantes?
Si te han sobrado palomitas de maíz (¿es eso posible?) y deseas recuperar su crujido, debes recalentarlas un poco en el microondas o el horno, esta vez sin aceite. La velocidad de aumento de la temperatura es clave para que no lleguen a quemarse, como también lo es estar muy pendiente y retirar de inmediato.
No esperes milagros, aunque sí vas a notar cambio en la textura.
Dulces, saladas o especiadas: tú eliges
La gente suele prepara palomitas con grasas vegetales o animales y, a veces, con azúcar, para que queden con una cubierta caramelizada. Pero hay muchas otras alternativas.
- Con curry. Mi preferida para hacer en casa por su sencillez y por el olor que dejan en la cocina.
- Con un toque de canela. Si les vas a añadir un poco de azúcarn ponles también canela, para potenciar su aroma.
- Con polvo de especias chai. Es una alternativa que sirve tanto para las versiones dulces como para las saladas y las cero-cero.
- Con otras mezclas de especias en polvo. Hay mezclas en polvo perfectas para postres e infusiones o chocolates a la taza. Todo es ir probando.
- Con cacao el polvo. A mí este experimento no me salió bien, posiblemente porque no me gustan nada las palomitas grasas. Utilicé un cacao azucarado comercial, con mucha mesura, y se quedó en el fondo del recipiente casi todo, aunque por poder, se pueden hacer palomitas al cacao.
Si usas cacao puro, recuerda que es muy amargo y es probable que tus palomitas agradezcan un poco de edulcorante (azúcar, miel, estevia…), o no.
Yo he recogido las recetas que he probado o tengo pendientes, como alternativa a las versiones menos saludables, aunque a lista de condimentos para palomitas de maíz es más extensa. ¡Sorprende a tu paladar!
Valor nutricional de las palomitas de maíz según el modo de preparación
El almidón resistente pasa por e intestino sin convertirse en energía. Presente en legumbres y cereales cocinados y después enfriados, aporta saciedad a la vez que parece ser saludable para la microbiota intestinal.
Hay mucho interés en lograr altas tasas de almidón resistente al cocinar hidratos de carbono complejos, y yo ahí no voy a a entrar. Lo que sí te puedo contar es que, cocinando de manera normal, lo normal es que ciertos alimentos presenten cierto porcentaje de este tipo de almidón.
¿Te has fijado en que las palomitas recién echan entran solas y no te sacian tanto? No te apures, con comértelas tibias ya disfrutas del poder saciante del almidón resistente, unido al de a fibra del pericarpio. Además, no es bueno consumir alimentos o bebidas muy calientes.
Te dejo un enlace por si deseas saber más cosas y mejor sobre el almidón resistente: https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0717-75182018000400271
El valor nutricional de las palomitas de maíz es bastante interesante. ¿Qué aportan hechas con una receta saludable?
- Fibra soluble e insoluble. La fibra soluble ayuda a regular los niveles de colesterol y triglicéridos, por eso se recomiendan consumir cereales integrales y, sobre todo, avena a personas con hipercolesterolemia.
La fibra insoluble ayuda con el tránsito intestinal. Las palomitas de maíz poseen la ventaja de que su fibra no va unida a sustancias laxantes, por lo que suelen ser bien toleradas por personas con el intestino delicado. Son aptas para celíacos, salvo si las preparas con sustancias con gluten o ha habido contaminación cruzada. - Hidratos de carbono, casi exclusivamente el almidón. Dependiendo de cómo preparemos las palomitas de maíz, podemos jugar con el tipo de almidón que contienen las palomitas y con su poder saciante. Los que no lleguen a este punto, serán fuentes de energía necesarias en la dieta, sobre todo si eres una persona deportista.
- Proteínas. Pocas, sobre un 1% del peso del maíz en crudo.
- Grasas. En torno a un 6% de la masa del maíz, pero son grasas saludables.
- Vitaminas, minerales y algo más. Los cereales integrales suelen ser ricos en vitaminas del grupo B, incluyendo la vitamina B1 o tiamina.
La carencia de tiamina severa se llama beriberi, y era una enfermedad poco frecuente, asociada al consumo elevado de alcohol, problemas de malabsorción intestinal o tratamientos crónicos con ciertos fármacos.
Sin embargo, con el abuso del refino o refinado de los alimentos, ya no es tan extraño detectar carencias incipientes o moderadas de tiamina. La solución, para personas sanas, pasa por no abandonar el consumo de cereales integrales y legumbres.
También aportan cantidades mportantes de niacina o vitamina B3, y algo de hierro y zinc. - Aporte energético. Una taza de palomitas de maíz sin aceite aporta unas 30 kcal., es decir, 3 tazas no suponen 100 kcal. En cambio, unos 100 gramos de palomitas de maíz preparadas de manera tradicional, con sus aceites o su mantequilla, pas a aportar unas 400 o 500 kcal.
La conclusión es clara, al menos para mí. Pese a tratarse de un producto moderadamente energético, si se preparan palomitas de maíz bajas en calorías, el consumo ocasional o moderado puede tener bastantes beneficios, al introducir una serie de nutrientes que comienzan a escasear en dietas modernas.
Un par de tazas de alguna de las recetas caseras de palomitas saludables puede servir como merienda rica en fibra. Y picar palomitas de maíz bajas en grasa en el cine no tiene por qué descompensar una dieta equilibrada, si hablamos de raciones moderadas.
Por otro lado, la sensación de saciedad que aportan las palomitas permite que, a poco que uno decida disfrutarlas en lugar de engullirlas, darse el gusto de vez en cuando no altere una dieta equilibrada ¡o una hipocalórica! En efecto, puedes aprovechar el efecto saciante de las palomitas de maíz para adelgazar, si tu problema es la necesidad de picotear a cada rato.